El arte de tejer: tejiendo los hilos del tiempo y el destino

mujeres mayores de pueblo sentadas en la calle hilando juntas mientras conversan

Siempre me ha llamado la atención la acción de tejer. Me parece una de las habilidades más enriquecedoras que ha desarrollado el ser humano. Lo considero un arte, el arte de tejer, y se le dedican cuadros, libros, películas, documentales, exposiciones, etc. Está presente en la mitología y en el ideario popular de numerosas y variadas culturas.

Es más, de un tiempo a esta parte, se ha puesto de moda y han surgido todo tipo de iniciativas alrededor.  Por cierto, ¿sabías que se puede tejer con cabello humano? (solo en Europa, se produce cada año 72 millones de kilos de residuos de cabello humano). O que hay máquinas que reciclan la ropa usada desechada y la convierten en hilos y tejidos.

Empezaré por definir qué se entiende por TEJER

Según la RAE, tejer significa:

  • Entrelazar hilos, cordones, espartos, etc., para formar telas, trencillas, esteras u otras cosas semejantes.
  • Formar en el telar la tela con la trama y la urdimbre.
  • Hacer punto a mano o con máquina tejedora.
  • Discurrir, idear un plan.
  • Componer, ordenar y colocar con método y disposición algo.

Vemos pues que es un verbo que se puede utilizar literal y simbólicamente.

Breve recorrido a través de la historia del tejer

Es más que probable que conozcas el mito de Aracne o el cuadro de ‘Las hilanderas’ de Velázquez. Seguro que recuerdas la rueca (o huso) con la que La Bella Durmiente se pincha. La historia y la cultura del ser humano está poblada de alusiones al acto de tejer, incluso antes de que el ser humano aprendiera a hacerlo. ¿Cómo es esto posible?

Porque el hombre aprendía observando a la Naturaleza y es ahí donde descubrieron a la mejor tejedora del mundo: la araña (más abajo hablaré sobre este fascinante animal).

ilustración de una araña tejiendo una telarañaLa araña era un animal venerado por muchas culturas antiguas (egipcia, griega, nativo-americana, africana, hindú o japonesa). Era considerada un poderoso TOTEM espiritual.  Los griegos tenían a Aracne, la cultura mapuche-tehuelche tenía a Llallín y la jamaicana a Anansi, la Wayuu tenía a Waleker y los Ojibwa tenían a Ojibwe de Asibikaashi, por citar algunas.  Su presencia es tal, que existe una disciplina, la Aracnología cultural, que se ocupa del estudio de los arácnidos en las diversas manifestaciones artísticas, culturales y religiosas de la especie humana. Seguro que sabes qué es un atrapasueños. Quizás te hayan regalado uno. Para los Ojibwa, los atrapasueños sirven para filtrar los sueños y que solo pasen los  positivos. Regalar uno es una tradición que refleja un deseo de brindar paz, protección y energía positiva al receptor.

Existen innumerables ejemplos en la tradición oral y escrita en los que se cuenta que una araña enseñó al ser humano a tejer.

Desde la prehistoria (35.000 y 10.000 antes de Cristo), cuando el hombre aprendió a coser pieles de animales para resguardarse del frío, pasando por Persia, Mesopotamia y el Imperio Egipcio, las mujeres y su habilidad para crear definieron el destino del mundo. Tejer fue siempre una tarea de mujeres. En algunas comunidades, la mujer tejedora tenía un estatus superior.  A través de sus creaciones contaba la historia del clan, incluso antes de inventarse la escritura. Esta sabiduría se enseñaba a través del tiempo de madres a hijas, de generación en generación.

El huso y el telar son inventos del neolítico (se hilaba lino para el verano y lana para el invierno). Telas como el lino y la seda sirvieron como moneda de cambio entre imperios. Los egipcios eran grandes hilanderos artesanales y se considera a la antigua China cuna de los tejidos artesanos. Lo fenicios fueron grandes comerciantes y potenciaron técnicas artesanales textiles relacionados con los tejidos: hilado, cardado, batanado, bordado y tintes. Con el descubrimiento de América llegan materias para tintes y el uso de la seda, la lana merina o la plata. Los artesanos gozan de mucho prestigio social y poder adquisitivo. Con el Renacimiento, llegan nuevas modas de tejidos y técnicas textiles como el encaje. Luego llegó la revolución industrial con sus fábricas y telares. La demanda de hilo de algodón a partir de mediados de siglo XVIII impulsó la búsqueda de nuevos ingenios. La abundancia de hilo condujo a la necesidad de tejer con mayor rapidez, lo que propició que E. Cartwright creara un telar mecánico en 1874 cuyo funcionamiento se realizaba mediante vapor. Y llegamos a nuestros días y la slow fashion (algo inconcebible para nuestros ancestros). Como muestra suficiente para hacerse una idea.

La araña: la mejor tejedora del mundo

La habilidad de la araña para crear hilos de seda (hilar) y con ellos poderosas telas o redes (tejer) sigue fascinando a los científicos. Se la estudia desde todos los ámbitos. Es apasionante observar cómo estos pequeños animales construyen con tanta precisión y eficacia estructuras complejas.

Cada hilo de los que conforman las telarañas es de un tipo de seda diferente producido en una glándula distinta. Cuentan incluso con una seda que actúa como cemento y que emplean para reforzar los puntos de unión. Las formas en las que las arañas emplean su seda son increíblemente variadas.  Y no solo tejen telarañas radiales. Hay arañas que sólo producen seda para forrar su madriguera o como punto de anclaje cuando tienen que cubrir distancias largas. Otras tejen una tela portátil que lanzan sobre la presa cuando ésta se acerca lo suficiente.  La araña boleadora balancea una bola de seda adhesiva como si de una honda se tratase. Pueden emplear su seda para cazar, almacenar su alimento, proteger su descendencia o como cuerda de seguridad para desplazarse, llegando incluso a utilizarla a modo de vela para volar a merced del viento. La seda utilizada como soporte en las telarañas y en los desplazamientos, es la más dura y resistente .

Si hablamos de la composición de estos hilos de seda, la cosa se pone aún más emocionante.

hermosa telaraña en la naturaleza

La seda de araña tiene una tenacidad insuperable. La tenacidad tiene en cuenta la resistencia a la rotura y la capacidad de deformación de los materiales. Es la cantidad de energía que un material puede absorber, bien sea deformándose o resistiendo la rotura, antes de romperse. La seda de araña puede ser más tenaz que la fibra de carbono o el acero (83 veces más tenaz). Las especies más recientes tienen hasta 7 glándulas diferentes en su abdomen para producir un tipo de seda distinto dependiendo de la función que quieran darle.

La Naturaleza, como siempre, asombrosa y fascinante. El mejor espectáculo del mundo.

Tejedoras e Hilanderas famosas: hilar y tejer.

Hilar es transformar una fibra textil (lino, cáñamo, lana, seda, algodón, etc.) en un hilo continuo y cohesionado. Tejer es entrelazar hilos para formar cualquier tipo de tejido.

El antiguo oficio de hilandera, uno de los más arraigados en la cultura y el folclore, está ligado a otros como el del esquilado de los rebaños de ovejas, el de mercader y el de tejedora.  Ellas cogían los grandes fajos de lana cardada y convertían cada filamento en hilos separados entre sí, obtenidos a base de entrelazar varias hebras entre sí. Con la llegada de la industrialización y los grandes telares este oficio fue desapareciendo, Un viejo oficio que aúna las características de la artesanía y la magia de las conversaciones y la tradición oral. Porque si a algo está ligado este noble arte, que convierte fibras de animales o vegetales en hilo con el que fabricar tejidos, es a la oralidad, pues a la vez que las mujeres hilaban y tejían, se contaban historias y noticias venidas de otros lugares (filandón leonés). Un oficio ligado estrechamente al huso y la rueca, considerados objetos mágicos en ciertas culturas antiguas. ¿Sabías que con Gandhi, la rueca se convirtió en símbolo de la lucha contra el imperialismo británico?

Podría decirse que, la tejedora más famosa de la historia es sin duda Aracne, seguida de Penélope, la mujer de Ulises.

El mito de ARACNE (del griego ἀράχνη, ‘araña’) cuenta la historia de una joven, hija de un tintorero y tejedora muy habilidosa. Alardeaba de ser más habilidosa que la diosa Atenea, diosa inventora de la rueca y del arte de tejer. Esta, al enterarse, enfurecida, la reta en una competición. Atenea teje un tapiz donde aparecen los doce dioses del Olimpo y las derrotas que sufren los humanos cuando se enfrentan a ellos. Aracne para superarla, y también algo molesta, teje un hermoso bordado en el que se ven los defectos de los dioses y sus amores mortales. La diosa enfurecida destroza su creación y la convierte en araña obligándola a tejer durante toda la eternidad.

ilustración de una mujer tejiendo y destejiendo en un telarY qué decir de Penélope (‘La Odisea’), uno de los personajes femeninos de la literatura más atractivos de la historia. Para evitar a los pretendientes que la acuciaban y que aspiraban al trono de su marido, el rey de Itaca desaparecido, fingió tejer un sudario y prometió que al finalizarlo elegiría a uno de ellos. Para evitar tal cosa, Penélope destejía cada noche, lo que había tejido por el día. 

El tercer puesto en el ranking es para el conocido cuadro de Velázquez ‘Las Hilanderas’ el cual ha sido también objeto de innumerables interpretaciones.

Doy por concluido mi particular reconocimiento a esta evocadora habilidad del ser humano y a todas la mujeres que la han desarrollado a través del tiempo enriqueciendo nuestro desarrollo y nuestra historia como especie.

El toque final de esta entrada, lo pone un maravilloso post sobre el tema de Una Antropóloga En La Luna.

Para quien le interese, hay lecturas maravillosas como, por ejemplo, ‘Hilos, caminos y el tejido de la vida’ de Sabina Aguilera.

Hablar sobre el simbolismo del acto de TEJER daría para una entrada entera (este post tendrá segunda parte):

De acuerdo con la cosmología maya, la Diosa de la Luna Ixchel era la patrona del hilo, y su hija Ixchebelyax, la Diosa del Bordado. El acto de tejer simboliza el nacimiento y la vida, abrir y cerrar el telar, los latidos del corazón, y el esfuerzo de la tejedora, el parto que origina la vida. De ahí que desde tiempos remotos a las tejedoras se les considere madres de la creación.

Desde la antigüedad, el tejido ha sido un símbolo de conexión, unión y armonía. Todas las tradiciones lo han conocido relacionado con la malla del universo y su cuadriculado. A través del tacto, la función de proteger y cuidar, en su significado o en sus símbolos los tejidos han transmitido el amor de las personas que los realizaban hacia otras.   Continuará …

’En las tardes de invierno, hila, canta y espera… es la hilandera’’

Hilanderas y Tejedoras del siglo XXI

 

Broche de Oro 

Y hablando de hilos y de tejer, como cinéfila que soy, no puedo dejar pasar la ocasión de mencionar a esos personajes de cómics, series y películas que tienen poderes arácnidos y son capaces de crear hilos y telas (redes), tanto físicas (Spider Man) como hechas de energía psiónica (Madame Web)

 

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Para mí, la Comunicación es una herramienta indispensable para contribuir al cambio y desarrollo personal y socio-económico. Es el recurso estratégico más importante de cualquier organización e incluso de una persona.
Firme defensora de la importancia de mantener relaciones positivas en todos los ámbitos.
Seguidora del Triple Filtro de Sócrates a la hora de comunicar-me.
Puedes leer más sobre lo que escribo en

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