✅ Una noche, un abuelo y su nieto estaban sentados alrededor de una hoguera conversando. Pertenecían a la tribu Cherokee. Lo hacían a menudo. En esos momentos, el anciano le contaba historias a su nieto a través de las cuales le iniciaba en los misterios de la Vida. Con todo, era hombre de pocas palabras. Esa noche, le habló a su nieto sobre una batalla. Una que se mantiene en el interior de cada persona.
✅ El anciano comenzó diciendo:
“Dentro del hombre existe una lucha entre dos lobos.
Un lobo es feroz y negro. Es el Mal. Es la ira, la envidia, los celos, la presunción, el dolor, el odio, la avaricia, la arrogancia, la autocompasión, el resentimiento, la inferioridad, las mentiras, el orgullo, la lujuria, la superioridad, la desconfianza y el ego.
El otro lobo es majestuoso y blanco. Es el Bien. Es el gozo, la paz, el amor, la esperanza, la serenidad, la humildad, la bondad, la benevolencia, la empatía, la generosidad, la verdad, la compasión y la fe.”
El nieto se quedó pensativo y tras varios minutos le preguntó a su abuelo:
¿Y qué lobo gana?
El anciano Cherokee le miró con una profunda y amorosa mirada y simplemente contestó:
“Gana el lobo que tú alimentes.”
¡Cuida tu diálogo mental!
Sé consciente de los y mantén al lobo negro SIEMPRE a raya. Los pensamientos que dejas anidar en tu mente, configuran tu realidad, determinan la vida que llevas. Filtra todo lo que dejas entrar en ti, a través de tus sentidos: lo que lees, lo que ves, lo que escuchas (ambientes, personas, conversaciones, películas-series, lecturas). Presta atención SOLO a las cosas que te enriquecen, que te aportan valor, que mantienen tu energía vibrando alto.
La superación personal es cuestión de cada día.
Cuida tus pensamientos, porque se convertirán en tus palabras. Cuida tus palabras, porque se convertirán en tus actos. Cuida tus actos, porque se convertirán en tus hábitos. Cuida tus hábitos, porque se convertirán en tu destino (Ghandi).
